Un total de 17 014 campesinos y pescadores artesanales del país dejaron de pertenecer al Seguro Social Campesino (SSC) en tres años, según registros del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS).
Hasta marzo de este 2022 se registraron 370 520 afiliados, frente a 387 534 inscritos en el mismo mes del 2019, antes de la pandemia.
Por cada afiliación de un jefe de hogar al SSC se benefician todos los miembros de la familia que sean dependientes, como esposa e hijos menores de edad. Actualmente son cerca de 1,2 millones de beneficiarios de este seguro, señaló Xavier Toledo, director del Seguro Social Campesino, ante la Asamblea Nacional.
Este régimen es un ejercicio de responsabilidad social y solidaridad del IESS, ya que se financia con el aporte de todos los asegurados y empleadores.
No se conoce con exactitud las razones por las que se redujo la cantidad de afiliados de este seguro, que está destinado para atender exclusivamente a las personas que trabajan en el área rural y laboran en el campo, así como a quienes se dedican a la pesca artesanal. Su aporte mensual es de USD 2,39.
Hasta el cierre de esta edición, el IESS no informó las causas para la disminución de los afiliados de este seguro especial. Sin embargo, Patricia Borja, experta en temas de seguridad social, señaló tres posibles factores que incidieron:
El primero es que, según la ley, debe haber una relación directa entre el crecimiento de los afiliados del seguro general y los del seguro campesino. Desde 2019 también se registra una reducción de los afiliados bajo relación de dependencia. Según registros de la institución, 154 682 de estos afiliados dejaron de aportar durante estos tres años; es decir, se quedaron desempleados.
La segunda causa sería las acciones de control y verificación de las afiliaciones que realiza el IESS, ya que la institución tiene la obligación de revisar que los afiliados a este régimen reúnan los requisitos previstos en la normativa.
La tercera razón puede ser que los afiliados no cuenten con los recursos necesarios para hacer las aportaciones, debido a la situación económica actual del país.
Beneficios
Los afiliados al Seguro Social Campesino y su núcleo familiar tienen derecho a la cobertura de salud como: servicio odontológico, exámenes médicos, medicina preventiva, medicamentos y utilización de hospitales del IESS, en caso de hospitalización y cirugías.
De algunos servicios se beneficiaron Raúl Vidal, de 48 años; su esposa y sus dos hijas. Él perteneció al dispensario del SSC del recinto El Porvenir, en el cantón El Carmen (Manabí), por más de ocho años, hasta el 2020. Durante ese tiempo se dedicó a actividades agrícolas en una finca platanera.
Su esposa y sus hijas menores de edad recibieron atención médica, sobre todo odontológica, recordó. Asimismo, señaló que a su cónyuge le tuvieron que operar de la vesícula, la intervención la realizaron en el hospital del IESS de Santo Domingo.
Por ejemplo, su padre es jubilado del Seguro Campesino y recibe una pensión de USD 100 mensuales. Los beneficios se extienden a su madre, que puede atenderse en los dispensarios del IESS.
El SSC dispone de 659 dispensarios médicos comunitarios a escala nacional, que brindan atención de primer nivel. Las personas que no pertenecen al Seguro Campesino deben acudir a las unidades médicas de la red de salud pública para ser atendidos.
Pese a ser uno de sus derechos, los afiliados se quejan por la falta de medicinas y médicos. El director del SSC, Xavier Toledo, reconoció que hay desabastecimiento en unidades médicas de la institución. Actualmente, el Seguro trabaja en la consecución de medicinas e insumos médicos, agregó.
Frase: «En promedio, el número de atenciones médicas que presta el Seguro Social Campesino cada año a sus afiliados es de 2 millones”. Xavier Toledo.Director del Seguro Social Campesino. (El Comercio)