El Servicio Nacional de Gestión de Riesgos de Ecuador (SNGRE) informó este martes que las fuertes lluvias registradas en las últimas horas dejaron como resultado más de 600 personas afectadas en las provincias costeras de Guayas y el Oro.
Según un informe preliminar del SNGRE, las lluvias produjeron el desbordamiento del río Vinces, en Guayas, lo que dejó a 115 familias afectadas en la parroquia Antonio Sotomayor.
Además, en el cantón de Santa Lucía «24 personas fueron evacuadas de sus viviendas y trasladadas a alojamientos temporales» de esa localidad de la provincia de Guayas, precisó la fuente.
En el cantón Salitre, también en Guayas, en sectores como La Clemencia y Recinto Palo Prieto «todavía se encuentran inundados», aseguró la unidad de emergencias.
El cantón Jujan fue otra localidad afectada por las intensas precipitaciones que provocaron el desbordamiento de los ríos Jujan y Amarillo, y de los afluentes Carrizal y auza.
Personal del SNGRE visitó los sectores de Morochal y Tres de Abril, en Guayas, donde efectuó la entrega de paquetes o kit de asistencia humanitaria a las familias afectadas.
Según el Instituto Nacional de Meteorología e Hidrología (Inamhi), las últimas lluvias se extendieron por casi todo el territorio nacional y aseguró que en localidades como La Concordia, Milagro y Guayaquil los niveles «sobrepasaron los 100 litros por metro cuadrado».
El SNGRE aseguró, además, que otra de las provincias mayormente afectada por las inundaciones fue la costera de El Oro, donde se registraron 161 personas afectadas, así como 44 viviendas y 16 personas evacuadas. La localidad de Santa Rosa, en El Oro, es una de las ciudades más impactadas por los temporales, con 92 personas y 29 viviendas afectadas.
El pasado 7 de marzo de 2019, el SNGRE resolvió aumentar el nivel de alerta amarilla a naranja, en las provincias costeras de Manabí y Los Ríos, por los efectos de las intensas lluvias.
Según las autoridades ecuatorianas, las fuertes precipitaciones en varias zonas del país obedecen a la temporada lluviosa que suele extenderse hasta finales de abril. (El Comercio)