El sábado 5 de mayo fue la última vez que Gloria Gavilánez se comunicó por teléfono con su hijo Wilson Ilaquiche, que el próximo mes cumple 29 años, militar del Ejército reportado como desaparecido en la población de Tobar Donoso (Carchi), límite fronterizo entre Ecuador y Colombia, desde la noche del pasado sábado.
El domingo, Día de la Madre, Gloria nuevamente llamó a su hijo, pero el teléfono celular estaba apagado. Desde ese momento se preocupó por no tener información de su familiar. En horas de la noche, un oficial le dio la noticia de la desaparición de su vástago, contó.
El lunes decidió viajar con su hermano materno Héctor Sigcha desde Valencia, provincia de Los Ríos, donde residen, hasta Esmeraldas. De inmediato se trasladaron al Batallón de Infantería Motorizado Bimot-13, para tener información oficial de la desaparición.
Wilson Ilaquiche fue transferido hace un mes, con un contingente de tropa, desde el Grupo de Fuerzas Especiales Nº 26 Cenepa, acantonado en Quevedo, Los Ríos, para reforzar la seguridad en la frontera norte. “Nos comentaba que la situación en la frontera norte estaba un poco complicada por la guerrilla y los incidentes causados por Guacho, pero que se encontraba bien”, recordó su tío Sigcha.
Esta nueva desaparición en la zona de la frontera norte se suma al secuestro de la pareja de Santo Domingo, ocurrido hace un mes, y al plagio y posterior asesinato del equipo periodístico de El Comercio, que fue secuestrado el 26 de marzo en Mataje, Esmeraldas.
Estas acciones se dieron tras atentados y hechos violentos ocurridos desde enero pasado en San Lorenzo y Eloy Alfaro, frontera norte, en Esmeraldas, los cuales han sido atribuidos al frente de Oliver Sinisterra, liderado por alias Guacho.
Tras el asesinato de los periodistas, circularon mensajes en redes sociales sobre una supuesta recompensa que daba alias Guacho por la captura de militares ecuatorianos. Esto, mientras Ecuador y Colombia también ofrecían dinero por información para dar con el paradero de Guacho. Ante ello, personal militar y policial extremaron precauciones.
En esta nueva desaparición de la que, hasta el cierre de esta edición, aún no se pronuncian las autoridades, se indica en un parte policial que a las 19:00 del sábado 12 se pasó lista a los 50 militares y 2 policías asignados al destacamento militar de Tobar Donoso, al mando del capitán Marco Cano. Ahí, el oficial al detectar aliento a licor en varios militares dispuso que se fueran a descansar.
Pero cuatro militares, incluido el desaparecido, habrían bajado a un bar sin nombre, en Tobar Donoso. Ilaquiche habría salido con una joven y de ahí no supieron nada más.
Desde la noche del sábado los militares empezaron, sin éxito, la búsqueda de Ilaquiche. Personal de la Dinased de Esmeraldas se movilizó a Tobar Donoso para las investigaciones del caso. Ayer, los tres militares que acompañaron a Ilaquiche rindieron su versión en la Fiscalía y Dinased, en la capital esmeraldeña.
Caso de periodistas
El lunes, tras la entrega de documentos desclasificados por parte de las autoridades a los familiares del equipo periodístico de El Comercio, estos documentos estarán en custodia en una caja de seguridad bancaria hasta que lleguen delegados de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. (El Universo)