Nueva York decretó que la vacunación contra el sarampión será obligatoria en varias zonas de Williamsburg, Brooklyn, para combatir la epidemia que afecta sobre todo a la comunidad judía ortodoxa residente en la zona y opuesta a las vacunas.
El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, declaró este martes 9 de abril del 2019 una emergencia sanitaria pública debido a la epidemia de sarampión, lo cual le permite exigir la vacuna contra esa enfermedad, las paperas y la rubeola (MMR por sus siglas en inglés) a todos los residentes de las zonas afectadas de Williamsburg, un barrio donde también viven muchos judíos ortodoxos.
Inspectores sanitarios verificarán los carnets de vacunación de todas las personas que hayan estado en contacto con los enfermos, y aquellos sin la vacuna pueden recibir una multa de USD 1.000 o ser castigados con hasta 15 días de prisión.
La declaración de emergencia sanitaria llega tras la decisión del gobierno municipal de ordenar a todas las “yeshivas”, las escuelas talmúdicas a las que asisten los niños judíos ortodoxos, y a todas las guarderías que atienden a la comunidad en Williamsburg a excluir a estudiantes que no han sido vacunados.
Si no lo hacen, las escuelas se enfrentan a un eventual cierre y sus responsables pueden ser procesados.
La ciudad de Nueva York lanzó hace varios meses una fuerte campaña para promover la vacunación, distribuyendo folletos, difundiendo información en línea y llamando por teléfono en yidis a miles de miembros de la comunidad ortodoxa.
La vacuna contra el sarampión es efectiva en un 97%. (El Comercio)