En el Austro del país, donde están provincias como: Azuay, Cañar, Morona Santiago, entre otras, hay una nueva oleada migratoria. Los principales destinos son países como: Estados Unidos (EE.UU.), Canadá, España e Italia.
Y hay claras evidencias de esto, por ejemplo, lo que ocurrió afuera del Registro Civil en Cuenca la noche del martes y madrugada del miércoles: unas 100 personas durmieron en la calle para obtener un turno y sacar el pasaporte.
“El incremento en estos últimos días está rebasando las estadísticas, los números a los que estábamos acostumbrados… Hemos puesto todo nuestro esfuerzo incrementando el personal, incrementando los equipos…”, indicó.
Este aumento en la demanda de pasaportes obligó al Registro Civil desde ayer a extender su horario de atención: de 07:00 a 18:00, y los días sábados de 08:00 a 14:00. Obtener este documento toma unos 40 minutos.
“La mayoría de personas que estuvo en los exteriores del Registro Civil (el miércoles y jueves) no son azuayos, son de Chimborazo, Manabí, Esmeraldas…”, dijo. Y acotó que vienen a Cuenca porque aquí el trámite es sin turno previo.
Marcelo Cordero, abogado y asesor para la solicitud de visas a EE.UU., y Europa, quien trabaja para la firma CordVisas, coincidió en que hay una ola migratoria, y a su criterio es casi similar a la que ocurrió en 1999.
“Pero hay una diferencia, antes un 99% se iba de forma ilegal y corría mucho más riesgo porque debía cruzar hasta Centroamérica, por agua y tierra, para llegar a México y desde allí pasar a Estados Unidos (EE.UU.)…”, dijo.
Desde noviembre de 2018 México suprimió el requisito de visa en pasaportes ordinarios a nacionales de la República del Ecuador, para una estancia no mayor a 180 días y sin autorización para trabajar.
Según Cordero, otra alternativa para viajar a centroamérica al margen de la ley es mediante cruceros que recorren el Caribe. Pero esto se hace en menor medida, pues implica más controles y restricciones.
Maritza Vimos, abogada y quien al igual que Cordero también asesora para la obtención de visas, detalló que un coyote cobra entre 10.000 y 12.000 dólares por persona para ayudar a cruzar ilegalmente a EE.UU., desde México.
“Cuando usted va a México con un tour como turista no siempre puede ingresar, algunas veces las autoridades mexicanas sospechan que usted quiere llegar para luego pasarse la frontera y no le permiten, y le envían de vuelta…”, indicó.
Para Vimos la migración ilegal incluso lleva a padres de familia a poner en riesgo la vida de sus hijos, pues les entregan a coyotes para que los dejen en la frontera y las patrullas fronterizas de EE.UU., los recojan…”, mencionó.
Y es que las autoridades de EE.UU., por su política de reunificación familiar y protección a menores de edad, permiten que los pequeños puedan reencontrarse con sus padres así estos estén en condición de ilegales.
De acuerdo con Rommel Torres, investigador en temas de migración, hasta 2019 en EE.UU., vivían unos 517.00 ecuatorianos; en España cerca de 415.310; en Italia unos 85.300; en Canadá 15.900 y en Reino Unido aproximadamente 8.300.
La Embajada y Consulado de EE.UU., en sus páginas web han informado que en 2021 atenderán las solicitudes de visas que quedaron represadas en 2020 por la pandemia de la Covid-19.
“Tan pronto se determine que es seguro reanudar el procesamiento, pretendemos que las citas de rutina estén disponibles a lo largo de 2021. Los solicitantes que ya programaron sus citas en 2022 podrán adelantar sus citas…”, consta en el escrito.
Asimismo comunicó que el período de validez de las nuevas visas estadounidenses de turismo y negocios (categorías B1 y B2), emitidas para los solicitantes ecuatorianos, aumentó de cinco a 10 años desde el 8 de abril.
Caso
Milton Geovanny Quezada, de 39 años, oriundo del cantón Nabón, en la provincia de Azuay, murió a finales de marzo de este año en la frontera entre México y Estados Unidos (EE.UU.).
Cayó desde el muro fronterizo y sufrió graves fracturas cuando intentaba cruzarlo. Iba junto a otros compatriotas, quienes siguieron su camino y lograron ingresar ilegalmente al país del norte.
Su objetivo era radicarse en la localidad de Southampton en donde le esperaban algunos familiares. Ahora su familia busca ayuda de las autoridades ecuatorianas para repatriar el cadáver.
Ella salió del Ecuador en octubre del año pasado con la intención de llegar a los EE.UU. Su destino era New York, donde estaba su tío. A ella las autoridades norteamericanas le permitieron quedarse en ese país.
Los coyotes le cobraron cerca de 13.000 dólares por el viaje, pero finalmente la abandonaron. Ahora sus amigos y allegados recolectan dinero para ayudarla en su recuperación. (CSM)-(I)