Un sacerdote de la orden Opus Dei, una de las congregaciones más conservadores de la Iglesia Católica, fue acusado en Chile del presunto abuso de dos menores de edad hace dos décadas, según informó este viernes un comunicado de esa hermandad.
El sacerdote Patricio Astorquiza de 82 años, ordenado en 1962, fue denunciado ante su congregación «sobre hechos ocurridos hace aproximadamente veinte años cuando los denunciantes eran menores de edad», indicó la nota.
Las denuncias «se refieren a un acoso persistente en el tiempo y a un abuso de conciencia, ambas con posible connotación sexual», agregó el comunicado.
El Opus Dei inició en octubre pasado las investigaciones y las declaraciones de los denunciantes fueron remitidas a la Congregación para la Doctrina de la Fe, institución del Vaticano que investigó anteriores acusaciones de abusos contra curas.
«Desde octubre pasado, y mientras dure la investigación, se decretó como medida cautelar que el Padre Astorquiza no ejerza públicamente el ministerio sacerdotal», sostuvo el Opus Dei.
Astorquiza es el primer sacerdote del Opus Dei que es denunciado en Chile. Centenares de miembros de otras congregaciones chilenas han sido acusados por pederastia y altos representantes del clero fueron señalados como encubridores de esas atrocidades, y que son investigadas por el Vaticano.
El Ministerio Público chileno tiene abiertas cerca de 150 causas por las denuncias en contra de sacerdotes y obispos que se transformaron en un duro golpe para la Iglesia Católica del país.
El papa Francisco, en su cruzada por cumplir su promesa de «tolerancia cero» ante crímenes sexuales, aceptó durante el año pasado la renuncia de siete obispos chilenos, expulsó del sacerdocio a otros dos obispos eméritos y a los poderosos sacerdotes Fernando Karadima y Cristián Precht. (El Universo)