El vicepresidente de la República, Otto Sonnenholzner, recalcó que las medidas económicas tomadas son las correctas y apuntan a mejorar el crecimiento del país.
«Fueron las mejores en el país porque no se podía llegar con la situación a fin de año. Ecuador no soporta más endeudamiento. Tomamos esta decisión que desde el inicio dijimos que sería difícil, pero también le dijimos que este es un gobierno hacer lo correcto por encima de lo popular», señaló Sonnenholzner, durante una rueda de prensa que fue transmitida en cadena nacional, desde Guayaquil.
En ese sentido aseguró que los recursos obtenidos por la eliminación del subsidio serán destinados a los que menos tienen en el país. «Por eso nos mantenemos con la medida porque si sabemos que si retrocedemos lo único que peligra es la dolarización», sentenció.
En su alocución, el vicepresidente señaló que ante la situación del país, en las Naciones Unidas se están desarrollando las conversaciones con las autoridades indígenas, aunque aseguró que las negociaciones están complicadas debido que «no todos se sienten identificados con una sola persona».
«Hemos llegado a algunos avances en estas movilizaciones con los movimientos indígenas que no están identificados con los actos de violencias», dijo Sonnenholzner.
En cuanto a la escasez de productos, aseguró que se están coordinando cadenas de abastecimiento con transportistas para volver a llenar supermercados y tiendas de víveres.
“Se está mejorando el comercio exterior, esa es una buena noticia. Pero estamos perdiendo más con el país paralizado que con la eliminación del subsidio. Entiéndanlo por favor”, enfatizó.
Hizo un llamado a la paz a los ciudadanos y volvió a resaltar que los subsidios “no han sacado a nadie de la pobreza”.
«La mayoría de ecuatorianos están deseosos de volver a trabajar. Estamos logrando frenar esta pretensión de estabilizar al Gobierno por parte de grupos organizados y concentrados en hacerle daño a Ecuador», dijo. (LA HORA)
Sin tolerancia con quienes generan caos
El vicepresidente se refirió a los manifestantes que han sido detenidos, dicen que es una cantidad considerable de personas retenidas, entre ellos extranjeros. Al menos 27 extranjeros han sido detenidos en Guayaquil y podrían enfrentar una deportación.
Sonnenholzner aseguró que un número importante de extranjeros en sus testimonios declaran que reciben entre 40 y 50 dólares por asistir a las manifestaciones. «Un extranjero que no cumpla con las leyes no podrá seguir en Ecuador. Los sancionaremos con el peso de la ley». (EL UNIVERSO)