La nueva reforma tributaria del Gobierno contempla un mayor sacrificio frente al proyecto inicial, especialmente para personas que ganan más de USD 100 000 y empresas.
El Ejecutivo tenía previsto entregar el texto la noche de ayer, con un nuevo nombre: Ley para el desarrollo económico y la sostenibilidad fiscal. Sin embargo, el Ministerio de Finanzas adelantó, horas antes del envío, algunos detalles.
La idea del nuevo texto es conseguir ingresos fiscales por USD 1 800 millones en los próximos dos años; es decir, USD 300 millones más de lo que el Gobierno pretendía con su proyecto original.
Para alcanzar la nueva meta, introdujo tres cambios importantes. El primero tiene que ver con el pago del impuesto a la renta de personas naturales.
Inicialmente se planteaba una tabla que iba del 5 al 35%. En la nueva reforma tributaria, el Gobierno plantea un esquema que se inicia en 5% para quienes menos ganan y termina en 37% para las personas naturales que perciben más de USD 100 000 al año.
Este cambio generará entre USD 25 millones y 30 millones adicionales, aseguró Finanzas.
En el nuevo texto se mantiene la intención de reemplazar las deducciones de gastos personales con un descuento directo en el pago del impuesto por hasta USD 500 (para los que más ganan) y de USD 1 000 para los que ganan menos.
El tributarista Napoleón Santamaría explica que el esquema resulta demasiado confuso, difícil de explicar y aleja a los contribuyentes. “Era más sencillo subir el impuesto”.
El segundo cambio importante se relaciona con el aporte sobre patrimonios altos de personas naturales.
En el texto original, la tasa oscilaba entre el 0,5 y el 1,5% y se aplicaba sobre patrimonios desde USD 500 000. Este pago estaba previsto que se haga en los años 2022 y 2023.
Pero esta vez, Finanzas plantea que sea solo por un año y a patrimonios mayores a USD 1 millón, aunque con posibilidades de deducción de acciones, primera casa y terrenos improductivos.
El Gobierno también espera que más empresas contribuyan para atender la crisis. Inicialmente, se esperaba que sean 1 430 firmas, pero ahora serán unas 1 900.
El número de compañías aumenta porque en el texto original tenían que contribuir solo aquellas con patrimonio mayor a USD 1 millón y que tuvieron utilidades y mayores ventas el año pasado. Sin embargo, ahora lo harán aquellas que cuenten con un patrimonio superior a USD 5 millones, hayan o no tenido utilidades.
La tasa de esta contribución también subió, pues ya no será de hasta 0,7% sino de 0,8%. Será por dos años y ya no solo por uno, según dijo el Fisco.
Fausto Ortiz, exministro de Finanzas, cree que persiste el error de poner una contribución al patrimonio más alta para personas naturales que para empresas. “El que tiene un patrimonio personal de USD 4 millones va a pagar 1,5%, y otro que tiene USD 5 millones en su empresa pagará 0,8%. Se castiga al que tiene menos de USD 5 millones, porque pagan una tasa del doble. Es un error.
Finanzas defendió que con los cambios se redujo el esfuerzo para personas que quizás eran de bajos recursos, pero tenían alguna propiedad. Antes debían contribuir unas 20 000 personas, ahora serán solo 6 000, indicó.
Para el tributarista Santamaría, el impuesto al patrimonio “es correcto, es progresivo, apunta los más ricos”. (El Comercio)