Petroecuador anunció que hallaron en Refinería Esmeraldas 12 puntos calientes producto de daños internos

Los trabajos de mantenimiento a la Unidad FCC de la Refinería de Esmeraldas, considerada el corazón de la planta, ratificaron la existencia de 12 puntos calientes provocados por daños internos que comprometieron zonas del metal del reactor y regenerador, informó la empresa pública Petroecuador.

El hallazgo lo hizo la empresa Universal Oil Products (UOP) – Honeywell que hizo 20 recomendaciones a la estatal petrolera para solucionar los desperfectos durante la intervención.

Reparación mecánica, cambio de equipos, sustitución del refractario (capa de 20 centímetros de espesor ubicada en las paredes internas del reactor y regenerador) en zonas deterioradas, son algunas de las soluciones propuestas por la firma privada y que ya están siendo implementadas.

Pablo Flores, gerente general de Petroecuador, se comprometió a “poner a funcionar estos equipos en las condiciones técnicas adecuadas” dentro de los plazos previstos.

La Unidad FCC entró en mantenimiento programado desde el 14 de marzo del 2019 ante la presencia de 12 puntos calientes en su estructura que comprometían su operación y que ya fueron detectados a través de análisis técnicos elaborados en 2017.

En las nuevas inspecciones UOP identificó que la boquilla de distribución del catalizador (polvo fino utilizado en la reacción de craqueo del crudo), ubicada en la sección “Y”, que lo une con el regenerador, tiene daños producto del mal funcionamiento de la válvula deslizante.

También, la UOP halló roturas en dos brazos de la grilla, ubicada al interior del regenerador, donde se distribuye el aire para el proceso de regeneración del catalizador. Además, el daño de 18 boquillas de aire y 13 boquillas de drenaje de humedad.

Personal de Petroecuador y del Cuerpo de Ingenieros del Ejército colocaron al interior andamios de entre 27 y 35 metros de alto que permiten alcanzar la altura adecuada para revisar los sistemas de las secciones de fraccionamiento.

Los trabajos iniciados en marzo estaban planificados para durar 54 días, pero la empresa pública, a través de un comunicado, estima que “podrían extenderse”, aunque no especificó cuánto tiempo más demoraría la intervención. (El Comercio)

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