La imagen de Arizbeth Ambrosio se volvió viral en medio de las noticias sobre el desastre que dejó el paso del huracán Otis, en México. Ella es parte del grupo de policías de la Ciudad de México enviados al puerto de Acapulco, Guerrero, como parte de la brigada de apoyo a las víctimas de este desastre natural.
Ella y su equipo estaban realizando sus recorridos y actividades de rescate, cuando de repente escuchó el llanto de un bebé a lo lejos.
Una vez que terminó de auxiliar a unas personas, Arizbeth volvió a escuchar al bebé llorar, por lo que decidió buscar de dónde venía el lamento.
Ya identificado el origen del llanto, la oficial le preguntó a una mujer de nombre Elvira, que resultó ser la madre del niño, qué tenía el bebé, a lo que la señora respondió que tenía hambre porque no había comido en aproximadamente 48 horas, es decir en dos días.
Sin dudarlo, la oficial se quitó su equipo de seguridad para amamantar al bebe, no sin antes consultarlo con la mamá del pequeño, quien después de que su hijo se calmara le agradeció a la policía de la SSC.
Ambrosio es madre de un pequeño de un año y 7 meses a quién sigue amamantando, razón por la que contaba con leche materna en ese momento.
La oficial dijo que se sorprendió mucho de la rapidez con la que el bebé aceptó el pecho, demostrando que tenía mucha hambre, por lo que ante una pregunta de Azucena sobre si le gustaría reencontrarse con el pequeño dijo que sí.
Ante esto, reconoció que se sintió bien de que el bebé estuviera tranquilo después de comer: “Si no lo hubiera hecho me quedaría con la duda de qué hubiera pasado con el bebe”.