El Tribunal Penal de Esmeraldas sentenció a treinta y cuatro años y ocho meses de pena privativa de la libertad a Jimmy R., por el asesinato de su padre Jimmy Rosales Camacho, de 66 años. Además, le impuso una multa de cinco salarios básicos unificados y una reparación integral de 520.000 dólares.
El hecho se produjo el 22 de febrero de 2019, en el mercado municipal de Esmeraldas. En el lugar, la víctima había terminado de desayunar en uno de los puestos de comida ubicados en la parte exterior y se dirigió a las baterías sanitarias de la planta baja.
Hasta allí también llegó su hijo, Jimmy R., y se produjo un altercado verbal que terminó en una confrontación con arma blanca entre ambos. El padre, quien tenía una discapacidad en una pierna, trató de escapar; sin embargo, perdió el equilibrio y cayó al suelo. Eso fue aprovechado por su hijo para propinarle varias puñaladas en diferentes partes del cuerpo, lo que provocó su muerte casi inmediata.
En la audiencia de juzgamiento, el fiscal del caso, Diego Pérez –titular de la Fiscalía Especializada en Personas y Garantías– presentó los testimonios de familiares y testigos del hecho, de los agentes aprehensores y de quieres realizaron el reconocimiento del lugar de los hechos, y la fijación y levantamiento de indicios.
Asimismo, se presentó el testimonio del médico legista que practicó la autopsia y de los peritos de Criminalística, quienes confirmaron que el ADN encontrado en el arma que se decomisó al procesado, corresponde al de la víctima.
Una comerciante y amiga de Jimmy Rosales Camacho, comentó que el ahora fallecido le contó, que su hijo había jurado asesinarlo, porque meses atrás tuvieron un problema personal, por cuanto el joven para suplir su vicio de adicción le robaba las pertenencias de su casa y las vendía.