Jarrones, lámparas, fruteros, entre otros objetos de caña guadua son elaborados por las personas privadas de libertad (PPL) del Centro de Rehabilitación Social (CRS) Bahía, como parte de su rehabilitación.
En el horario de 08:00 a 16:00, alrededor de 20 PPL, se dedican a transformar la caña en novedosas artesanías.
Del 5 al 30 de marzo un nuevo grupo de internos será capacitado, el objetivo es lograr que más personas privadas de libertad aprendan la técnica y sean entes productivos al reinsertarse a la sociedad.
En las artesanías se aplica la técnica de pirograbado para dar un acabado diferente plasmando figuras, nombres sobre todo en los jarrones.
Rubén M., es el interno que inició la actividad hace dos años, ya que tenía la práctica y conocimiento en el oficio. Él facilita las herramientas a sus compañeros y enseña el trabajo en caña.
Por su parte, José R., quien ya recuperó la libertad aprendió el oficio que ahora es su fuente de trabajo ya que pudo iniciar un negocio.
Estas son nuevas opciones socio laborales, que les ofrece el Ministerio de Justicia, a través del centro penitenciario, para mejorar sus posibilidades de reinserción y que al salir puedan crear un negocio y mejorar su economía.
“Esta actividad nos sirve para rehabilitarnos y los ingresos para apoyar a nuestras familias”, manifiesta Julio F., quien aún se encuentra cumpliendo sentencia.
Por su parte José Z., otro interno que se dedica a ésta actividad señaló que es muy importante mantenerse ocupados con actividades productivas que les libera del ocio.
Dato
El costo de las artesanías es de 10 dólares en adelante, dependiendo del modelo. Además, se realizan también muebles de sala, licoreras, bares, alcancías entre otros, que son comercializados con apoyo de los familiares que llevan el producto cuando acuden a las visitas.