Las prioridades cambiaron, al menos en la Asamblea Nacional, después de las elecciones seccionales del 24 de marzo. Los partidos que antes promulgaban con urgencia reformas al Código de la Democracia ahora consideran que el tema “es importante pero no es urgente”. El tema se acerca a los 500 días sin ser retomado.
El segundo debate del paquete de reformas inició el 4 de enero de 2018. Tuvo como base el informe de la Comisión de Justicia que preside la correísta MarcelaAguiñaga. Ella reconoce que el tema quedó en el olvido y, tras quince meses, cree que es apropiado retomar.
¿Por qué hay organizaciones que prefieren alargar la discusión de cambios en la ley electoral? El proyecto contempla, entre otros puntos, la regulación de la propaganda de las instituciones del Estado y de los medios públicos, el fortalecimiento de las organizaciones políticas locales y la inclusión en la Ley de los Consejos Consultivos de las Organizaciones Políticas. También incorpora mecanismos para la inscripción de nuevas organizaciones políticas nacionales y prohíbe que el “líder” de las organizaciones políticas preste su imagen para la propaganda de los diferentes candidatos.
A criterio de Aguiñaga, este último tema sería uno de los obstáculos que tiene el documento. Rafael Correa, Jaime Nebot y Guillermo Lasso jugaron un rol importante en las últimas elecciones pese a no ser candidatos.
Asambleístas socialcristianos, de la Revolución Ciudadana y Alianza PAIScoinciden en que los cambios “son importantes pero no urgentes”.
“Creo que es un tema importante más no urgente. El país sigue enfrentando situaciones de índole económico. Son temas que deben ser tratados pero de una manera integral, en donde se garantice derechos, y que sobre todas las cosas avale el ejercicio democrático”, dijo a EXPRESO el asambleísta por Guayas, Vicente Taiano (PSC).
Criterio que es compartido por el coordinador de la bancada de la Revolución Ciudadana, Juan Carlos Lloret. Para él, es importante las reformas que se dé a un cuerpo normativo, pero se los debe hacer dentro de los tiempos en los que se debe llevar adelante y no fuera de la ley en donde se fortalezca los principios democráticos y de participación . “No es urgente, es importante”, sentenció.
No son los únicos que tienen este criterio. Alianza PAIS, a pesar de los resultados obtenidos en el pasado proceso electoral, cree que no es urgente tratar el tema. César Litardo, coordinador del bloque oficialista, sostuvo que es un tema importante que debe analizarse para ratificar los procesos democráticos de participación, mejorar el sistema de partidos. A sus ojos los cambios son importantes pero no se los podría calificar de urgentes.
Del otro lado también hay razones de peso. Organizaciones y movimientospolíticos locales y algunos nacionales creen que el tema ya debería estar en la agenda del pleno. Eliseo Azuero, del movimiento Alianza Amazónica, considera que es urgente el tratamiento porque el proceso electoral que pasó ha dejado dudas. Considera que hay acuerdos entre los partidos políticos grandes para mantener el sistema como está. “Esto se debe al maniqueo político de los partidos grandes, que se ponen de acuerdo para seguir usufructuando del dinero de los ecuatorianos, que en su momento deben dar cuentas”, afirmó.
Para el asambleísta de Pachakutik (PK), Elio Peña, es urgente tratar este tema hasta finales de año, para tener nuevas reglas para las elecciones del 2021, en donde se garantice la participación igualitaria.
“La reforma es urgente, porque de lo contrario caeremos en el candado que tenemos de que no se puede tocar la Ley Electoral hasta un año antes, y las elecciones del 2021 están a la vuelta de la esquina. Tenemos que hacer ahora la reforma en donde debe estar tomado en cuenta el análisis de la fórmula de asignación de escaños, porque ha sido inequitativa”, dijo la asambleísta de CREO, Lourdes Cuesta. (Expreso)