A Michael Steven Candelario Zambrano, de 19 años, lo vieron con vida por última vez hasta las 13:00 del viernes cuando dijo que iría a casa de su novia. Una hora después inició el toque de queda y el joven, no regresó a su casa ubicada en la parroquia El Salto del cantón Babahoyo, en la provincia de Los Ríos.
Hasta ese momento su padre Galo Candelario decidió esperar a que en cualquier momento llegara a casa pero las horas pasaban y su hijo no aparecía. No supo nada del joven hasta las 23:00 del mismo viernes, cuando un amigo de Michael llegó para contarle que se había ahogado. “Me dijo que estaban consumiendo sustancias estupefacientes a orillas del río y como vieron pasar las rondas de los policías y militares, se lanzaron al agua para evitar ser capturados por infringir el toque de queda”, añadió el padre de familia.
El progenitor continuó narrando que al parecer el amigo de Michael se quedó escondido entre los matorrales de la ribera de río pero su retoño, fue más avezado y habría intentado llegar al otro extremo del afluente. Al parecer eso no le fue posible y a medio río empezó a pedir ayuda porque se ahogaba.
Desde entonces iniciaron la búsqueda del cuerpo pero con personal reducido debido a la emergencia. Hasta que finalmente el difunto fue hallado flotando la tarde del domingo en las aguas del río Babahoyo. Personal de la Dinased se encargó del levantamiento del cadáver que fue llevado a la morgue de la localidad.
Michael era estudiante de 2º semestre de la carrera de Diseño Gráfico en el Instituto Superior Tecnológico Babahoyo y la comunidad estudiantil quedó dolida con la noticia. Después de la autopsia los restos del joven fueron conducidos directamente al camposanto para recibir cristina sepultura. (Extra)
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