“Ay, ¡qué dolor que tengo!”, decía don José en la puerta de su taller de motos, situado en Caupicho, sur de Quito. Minutos antes, tres hombres habían sido baleados en el lugar. Dos de ellos eran sus hijos.
Uno murió en ese momento. Sentado junto al cadáver, el padre era incapaz de asimilar que, el pasado sábado, el infortunio había caído sobre su familia.
Su otro hijo, quien seguía con vida, fue llevado inmediatamente en una moto a una casa de salud cercana. Pero don José presentía que no sobreviviría. Una bala le había atravesado la cabeza. “Yo quiero morir con mis hijitos”, lamentaba. Más tarde se confirmó que también había fallecido.
Mercedes (nombre protegido) narró que esa mañana, tres hombres en moto fueron a buscar a una de las víctimas. Llegaron hasta su vivienda, ubicada a unos metros del taller mecánico, y golpearon la ventana. “Se escuchó: ‘Sal o te mueres’”, recuerda la residente.
Nadie salió. Poco después, la motocicleta con tres ocupantes se cuadró frente al negocio de don José y ‘llovieron’ balas. Al menos, siete tiros escucharon los habitantes de la calle Leonidas Dubles. Una de las víctimas intentó esconderse en el baño, pero los gatilleros la alcanzaron. Al final, los tres hombres atacados perdieron la vida.
La escena
Hubo gritos, llantos, descontrol. Mientras tanto, los asesinos huyeron por la calle E6A. Horas más tarde, la policía capturó a cuatro sospechosos del triple crimen, entre ellos, el presunto autor intelectual. La operación se dio en La Libertad, sur de la urbe.
Dos de los aprehendidos son ecuatorianos y tienen antecedentes penales por robo, tenencia de armas y tráfico de drogas. Así lo confirmó ayer Freddy Sarzosa, director de la Dinased.
Los otros dos implicados son extranjeros (colombiano y venezolano). La Policía explicó que fue la compraventa de “una moto de dudosa procedencia” la motivación del ataque. Sin embargo, continúan las investigaciones para aclarar el hecho.
Vecinos del lugar temen por su seguridad. Dijeron que en las últimas semanas, la delincuencia no les ha dado tregua. “Es terrible que ocurra esto en pleno estado de excepción”, cuestionó Javier, quien prefirió mantener su apellido en reserva. Le preocupa que “por sapo” le vaya mal.
LAS CLAVES
Sospechoso
A los vecinos les llamó la atención ver a tres hombres en moto.
La normativa
Desde el 8 de junio, solo una persona puede ir en motocicleta.
Los aprehendidos
Fueron trasladados a Flagrancias.
(Extra)