En el barrio Los Esteros, al norte de Machala, se vivió una escena de terror. Alejandro Cuero Perlaza, de 19 años, fue asesinado de dos tiros por un guardia de seguridad de una bananera, quien lo persiguió luego de que la víctima se habí a cogido presuntamente una ‘mano de banano’.
Entonces emprendió la cacería, mientras “Fiti” como conocían a Cuero al verse descubierto se internó en las plantaciones para alejarse de su verdugo; sin embargo, del otro lado en un callejón sin salida estaba el guardia y lo “ajustició”. Uno de los tiros -según los testigos- fue a la altura del hombro y otro cerca de la cabeza.
Los casquillos se encontraban en el rústico camino mientras los curiosos aguardaban la presencia de las autoridades para las respectivas pericias. Previo a ello, al no llegar la ambulancia los familiares decidieron transportarlo en un triciclo y, luego, a bordo de una camioneta hacia una casa de salud. Pero no había mucho tiempo: “tío, tío, no me dejes morir, yo sé quien lo hizo”, había dicho el joven segundos antes de fallecer.
Otros familiares al retornar al lugar donde ocurrió el crimen estaban enardecidos, de hecho, intentaron atar cabos y presumir cómo se produjo. “No es un perro, era mi primo” -dijo una pariente- “por qué tenían que matarlo, si cogió algo debían llamar a la Policía”, agregó. Los peritos recogieron versiones y se dirigieron a la bananera donde trabaja el guardia, cuyo paradero es desconocido.
“Fiti”, trabajaba recolectando chatarra, vivía con sus abuelos en el barrio Washington García. No estudiaba, tenía 3 hermanos. Según una vecina que prefirió no identificarse el joven solía agarrar unos bananos de aquella finca, no obstante, la tarde de este martes, 11 de junio de 2019, lo pillaron y asesinaron.