La audiencia en la que se tenía previsto formular cargos contra el exvicepresidente de la República, Jorge Glas, y dos exfuncionarios por el caso Reconstrucción de Manabí no se instaló este miércoles 6 de septiembre porque el abogado del ex segundo mandatario no se presentó.
La defensa de Glas argumentó que tenía «un choque anafiláctico de dermatitis atópica», un diagnóstico que la fiscal general del Estado, Diana Salazar, lo calificó como «una alergia«.
Hoy se tenía previsto que Salazar plantee formalmente una acusación por presunto peculado contra Glas, quien fue presidente del Comité de Reconstrucción y Reactivación Productiva y del Empleo en las zonas afectadas por el terremoto del 16 de abril de 2016; Carlos Bernal Alvarado, quien fue secretario de dicho comité, y Pablo Ortiz Hidalgo, exgerente de la Empresa Pública de Desarrollo Estratégico (Ecuador Estratégico EP). Los abogados de los otros dos ciudadanos sí se presentaron.
La diligencia se iba a llevar a cabo en la Corte Nacional de Justicia (CNJ), en Quito. Aún no se ha definido cuándo se reinstalará esta audiencia.
El caso
La Fiscalía General del Estado (FGE) indaga la presunta corrupción que habría ocurrido con los fondos recaudados durante la vigencia de la Ley Orgánica de Solidaridad y Corresponsabilidad Ciudadana para la Reconstrucción y Reactivación de las Zonas Afectadas por el Terremoto.
Esa normativa, expedida en mayo de 2016, impuso tributos adicionales a quienes, por ejemplo, ganaban mil dólares o más mensuales, o a quienes tenían un patrimonio igual o mayor a un millón de dólares.
Asimismo, con la ley se aumentó durante un año el Impuesto al Valor Agregado (IVA). Pasó del 12 % al 14 %.
De acuerdo a la FGE, durante la vigencia de la ley se recaudó más de 1 614 millones de dólares que se destinaron a contratos y proyectos «que no fueron prioritarios en el contexto del terremoto».
«Ahora me están acusando de reconstruir Manabí. Tengo una larga lucha por delante. Seguiré luchando por el derecho a la honra y el buen nombre, por mi familia y por los militantes que están detrás», dijo Glas el pasado 17 de agosto, en una rueda de prensa.
Siete años después
El pasado 16 de abril, Ecuador recordó el séptimo aniversario de uno de los terremotos más destructivos de su historia reciente, de magnitud 7,8.
Ese fenómeno natural, ocurrido el 16 de abril de 2016, dejó más de 670 muertos, miles de afectados, así como millonarias pérdidas materiales.
Dicho terremoto azotó con intensidad a las provincias de Esmeraldas y su vecina Manabí, pero también afectó a otras zonas.
A la Fiscalía le ha tomado siete años recabar «los elementos de convicción suficientes» para formular cargos.
Otro proceso contra Glas
El exvicepresidente actualmente está en libertad. Salió de prisión en noviembre de 2022 gracias a una medida cautelar otorgada por un juez de Santo Domingo de los Tsáchilas.
El ex segundo mandatario cumplía una sentencia de seis años de prisión por el delito de asociación ilícita en el caso Odebrecht. Luego fue sentenciado a ocho años más por cohecho en el caso Sobornos.
Ya en libertad, Glas solicitó la unificación de ambas penas y la Justicia lo concedió, por ello solo responde por la sentencia más extensa.
Sin embargo, aún no se define si el también exministro del correísmo volvería a prisión o si podría acogerse oficialmente a la prelibertad -por haber estado ya un tiempo en la cárcel-, pues aún está pendiente la resolución judicial sobre el cómputo total de la pena.
Glas fue investigado también por el delito de peculado en el caso Singue. De hecho, fue sentenciado en primera instancia a ocho años de cárcel, pero un tribunal de la Corte Nacional de Justicia (CNJ) anuló la condena.
Hoy nuevamente Glas regresará a los tribunales, pero por la reconstrucción de Manabí.