Valentina Caicedo escuchó gritos de niños afuera de su casa y minutos después salió para ver lo que sucedía. Entonces encontró recostada en la acera a la menor de sus siete hijas. La niña de 12 años se cubría el rostro ensangrentado.
Ocurrió la noche del lunes en el recinto Las Piedras, en el norte de la provincia de Esmeraldas, y la mujer contó con lágrimas en el rostro que una vecina, de 17 años, que acosaba a su hija y se burlaba constantemente de su cabello afro, la atacó con una hoja de afeitar cuando su niña estaba sentada en el portal con sus amigas.
Una situación similar a la ocurrida este domingo en la isla Trinitaria, al final de una fiesta de cumpleaños en la que Génesis, una joven de 19 años, fue agredida con un estilete en el rostro cuando defendía a su hermana de otra mujer.
En ese caso, esta joven se someterá a una cirugía reconstructiva gratuita con el cirujano plástico Luis Pérez, pues el corte atraviesa el rostro y perdió parte de la nariz.
Al igual que la primera víctima, este miércoles Valentina Caicedo y su hija de 12 años llegaron a Guayaquil para una evaluación médica con Hernán Pérez Montesinos, hermano del cirujano que operará a Génesis.
La menor de 12 años será intervenida también en los próximos días. La niña tiene casi 80 puntos en el rostro.
El cirujano Hernán Pérez explicó que son cuatro cortes limpios y que al haber sido hechos con una hoja de afeitar no han arrancado piel.
“A pesar de ser profundos no han afectado los nervios, ella tiene sensibilidad y puede sonreír”, mencionó el médico, al que sí le preocupa que en la pieles oscuras es más probable desarrollar un mala cicatrización y queloides.
La familia de la niña presentó el martes la denuncia en la Fiscalía de Esmeraldas por agresión física y ataque con arma cortopunzante.
Según la denuncia, además de los cortes, la menor también presentaba golpes en el cuerpo.
La atacante sería Ivanna V., quien fue retenida para investigaciones, pero obtuvo medidas sustitutivas y salió libre. Ella debe presentarse dos veces a la semana ante el Juzgado de la Niñez y la Familia de Esmeraldas. El dictamen judicial se debe a que en la capital esmeraldeña no hay un centro femenino para menores infractores, situación que es rechazada por la familia de la agredida.
«En los últimos años se han incrementado estas agresiones, es muy frecuente que las agresiones de mujer a mujer se dirijan hacia el rostro. Al mes llegarán unos dos o tres casos por lo menos”, Luis Pérez, cirujano. (El Universo)