La Función Judicial, el Registro Civil General y el sistema penitenciario guardan el patrimonio documental e histórico más valioso del país.
Sin embargo está en riesgo de perderse por la falta de respaldo digital, técnico y presupuestario. Karina Logroño, subdirectora nacional de Archivo y Gestión Documental del Consejo de la Judicatura (CJ), revela que las autoridades están empeñadas en la digitalización de las causas, pero admite que es muy costoso.
“Solo digitalizar la parte histórica costaría $ 10 millones. Es un archivo histórico pasivo que sirve para la ciudadanía y a los investigadores”.
Con una inversión aproximada de $ 3’000.000 se inició el Archivo General de la Función Judicial en 2013. Ahí reposan 1’800.000 expedientes judiciales recuperados y datan desde 1700 a la fecha.
En un área de 4.000 m2, en el norte de Quito, se custodian los procesos judiciales de las materias: Civil, Penal, Tránsito, Familia, laboral, entre otras, de las provincias de Chimborazo, Tungurahua, Manabí, Azuay, Santa Elena y Pichincha.
Lo más importante del Archivo General es que entre las 129’000.000 de fojas, se encuentran 30.000 documentos históricos, únicos y de incalculable valor, intervenidos por curadores. El problema es que esto no está asegurado, sostiene la subdirectora de archivo del CJ.
Desde 1888 existe un presupuesto para el archivo de causas, pero no se dio la atención debida. Ahora cuentan con $10.000, agrega.
El tema de Guayaquil en el archivo de causas pasivas es más grave. Las 22’460.556 fojas guardadas en 23.111 cajas pronto tendrán que salir del edificio donde están por problemas del alquiler.
El presidente de la Corte de Justicia, Gabriel Manzur, tiene la esperanza que Inmobiliar les dé un inmueble en comodato para trasladar la documentación judicial.
Registro Civil con duplicado
En 1901 empezó a funcionar esta institución y desde el 14 de agosto de 2017 se activó el laboratorio restaurador de documentos, donde se determinó que de los 133’800.000 documentos registrales, entre el Archivo Nacional y Provincial, el 80% está en buen estado, el 16% en condición regular y el 4% en mal estado.
Hasta el momento están digitalizados 71’425.661 documentos. Esta tarea seguirá, indica el restaurador Ezequiel Barba. “El Registro Civil garantiza la disponibilidad de los documentos a los usuarios en caso de un desastre natural o incendio. Todo registro se realiza por duplicado”.
Sistema penitenciario
El expenal García Moreno, de Quito y la Penitenciaría del Litoral, en Guayaquil, trabajan en la recuperación de los documentos históricos.
En el expenal hay cinco libros en el Archivo Nacional de las 70 cajas que entregó el antropólogo y catedrático Jorge Núñez. En cambio en la cárcel de Guayaquil, que empezó a funcionar en 1959, existen archivos de hace cuatro décadas, pues antes hubo un gran incendio que borró parte de la historia. (El Telégrafo)