Luego de 14 meses de un proceso judicial desgastante, al fin se conoció el desenlace de la historia de un sujeto que habría descuartizado a su hijastro de 5 años. El hecho se registró en La Recoleta, centro histórico de Quito, l3 de diciembre de 2023 y este 11 de febrero se decidió el futuro de Eduardo, de nacionalidad venezolana.
El drama de la familia del infante comenzó incluso mucho antes de confirmarse el cruel asesinato. Durante el juicio se hicieron confesiones escalofriantes y se detalló que Eduardo conoció a la madre del pequeño el 11 de septiembre de 2021.
Esa fecha, ambos coincidieron afuera de un centro comercial del norte de la ciudad. En su declaración, el sospechoso contó que Sully, progenitora de la pequeña víctima, estaba acompañada de su marido. Ella le había pedido que la ayudara conseguir trabajo y él le pidió que le ayudara a vender planes de Internet.
Una noche, la mujer, de 23 años actualmente, había ido a la casa de Eduardo para pedirle ‘refugio’ porque habría peleado con su pareja. Desde esa ocasión, ambos mantuvieron una relación extramarital, a decir del sujeto.
Las agresiones en La Recoleta
Sully y sus dos hijos fueron a vivir a un inmueble con Eduardo, en el sector Monjas, sur de Quito, y para mediados de 2022, la familia de la joven denunció su desaparición, por lo que se iniciaron las investigaciones.
En el proceso, la mujer contó las vejaciones de las que fue víctima junto con sus pequeños. Entre estas fue el presunto abuso sexual de su hijita, de 8 años actualmente, caso que se confirmó y por el que también se abrió una investigación.
Para ese entonces, Sully procreó un hijo con Eduardo, de 46 años, quien presentaba a la muchacha como su hija, según un testigo. Sin embargo, le había cambiado el nombre a Mafer para que no los encontraran.
En diciembre de 2023, la mujer fue víctima de una agresión y quienes lo atestiguaron llamaron a la Policía. Al arribo de los agentes, encontraron a la joven y cuando tomaron su versión, ella les contó todo lo que había sucedido.
Entre los datos estaba que Eduardo había sacado al niño a cortarse el cabello pero cuando regresó lo hizo sin el pequeño. Al interrogatorio, el sujeto confesó que el infante estaba muerto y los llevó hasta un inmueble donde lo había entregado a un amigo.
La sentencia del padrastro descuartizador
El amigo de Eduardo confesó a EXTRA que él no sabía lo que contenía una funda que le entregó. Lo supo cuando llegó la Policía hasta el inmueble y recogió los restos del menor de edad, lo cuales estaban carbonizados.
Desde ese momento, el venezolano fue detenido y ha mantenido prisión para las indagaciones. El juicio se llevó a cabo este 16 de enero, pero el resumen apenas fue subido a la Judicatura a principios de febrero.
Luego de las versiones dadas por los allegados al menor asesinado, peritos, policías y del mismo implicado se tomó la decisión de enviar a prisión a Eduardo por un lapso de 34 años. Además se dispuso que Sully tuviera asesoramiento psicológico por todo el trauma causado.
Se ordenó también que el tipo deberá pagar mil salarios básicos unificados como multa así como una reparación integral de 5 mil dólares a Sully. También se dispusieron medidas de protección para ella y su familia, quienes fueron rescatados de ese suplicio en La Recoleta.