Un trágico accidente de tránsito sacudió la noche del domingo 20 de julio en el sector Estero Grande, cerca del recinto El Rosario, cantón El Empalme, provincia del Guayas. El bus número 01 de la cooperativa Reales Tamarindos, que cubría la ruta Quevedo–Portoviejo–Manta con más de 40 pasajeros a bordo, perdió el control en una curva y terminó volcado fuera de la vía. El siniestro dejó, hasta el momento, tres personas fallecidas y al menos diez heridas, según información preliminar.
Una de las víctimas fue identificada como Mireya Vargas, reconocida docente de la unidad educativa 17 de Agosto. La profesional, que residía en el recinto El Limón, viajaba con frecuencia a Manta por motivos laborales. Las otras dos víctimas aún no han sido oficialmente identificadas. Algunos pasajeros lograron salir del bus por la escotilla de ventilación, mientras que otros fueron rescatados por testigos que rompieron las ventanas en medio del caos.
Equipos de emergencia acudieron rápidamente al lugar para rescatar a los heridos y trasladarlos a distintas casas de salud. Bomberos y agentes de tránsito unieron esfuerzos para estabilizar la situación. La comunidad educativa y local ha expresado su profunda consternación por la muerte de Mireya Vargas, una mujer que dedicó su vida a la enseñanza y que hoy es recordada con cariño por sus estudiantes y colegas.
El bus siniestrado fue retenido por la Comisión de Tránsito del Ecuador (CTE) y llevado a un canchón del cantón El Empalme mientras avanzan las investigaciones. El conductor, sin embargo, huyó del lugar tras el accidente y es buscado por las autoridades. Este nuevo hecho lamentable vuelve a poner sobre la mesa la urgente necesidad de mejorar la seguridad vial y realizar controles más estrictos a las unidades de transporte interprovincial.