Su familia lo vio por última vez a las 04:45 luego de que llevara a su esposa e hijo a su casa para descansar tras haber cenado en casa de su cuñada por Nochebuena.
Luego él volvió a salir de la vivienda y no se supo más hasta que cerca de las 06:30 cuando un vecino lo encontró en un terreno baldío ubicado a pocos metros de su casa.
Quien encontró el cuerpo de Mauricio Arévalo, de 31 años, pensó que estaba ebrio y que se había caído, pero cuando lo volteó se encontró con una herida cortopunzante en el cuello de la que supuestamente aún salía sangre.
El hecho se registró en el bloque 3 de Balerio Estacio, en el noroeste de Guayaquil. Ahí los moradores estaban alarmados.
Cerca del cuerpo había un rastro de sangre, al parecer, Arévalo herido intentó caminar pero se desmayó, contaban los vecinos.
La familia de la víctima contó que faltaba el celular de Arévalo en la escena y presumen que se trató de un robo. La víctima laboraba en una empresa de confitería en la vía a Daule.