La situación en la parroquia Picoazá ha dado un considerable giro en estos últimos días. Y es que desde el 5 de abril, cuando fue intervenida por ser considerada una de las zonas más críticas de contagio del COVID-19, hasta la actualidad se ha logrado reducir la curva al igual que el número de personas sancionadas por incumplir las disposiciones del COE Nacional.
Silvio Larrea, director municipal de Control Territorial, informó que en Picoazá se han emitido 91 sanciones, de esta cifra la mayor parte corresponde a las 2 primeras semanas de intervención, puesto que ahora la media es de 2 personas sancionadas por semana.
Para el funcionario estos números son un aliciente y se traducen en que la ciudadanía ha comenzado a entender la importancia de acatar las resoluciones del COE Nacional.
Cabe señalar que en dicho territorio se encuentra un equipo de planta integrado por los centinelas, fuerza pública y agentes municipales, quienes cumplen turnos diarios desde la 0700 hasta las 16h00.
“Se observa un comercio ordenado, no hay comercio informal, esto lo hemos logrado de forma paulatina gracias a un trabajo en equipo con la ciudadanía”, señaló Larrea.