137 millones de dólares será la inversión en el denominado Plan Tripe AAA (agua potable, alcantarillado y saneamiento ambiental) en las parroquias de Portoviejo que debe ser concluido en el 2025.
El proyecto es financiado con un crédito del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), Banco Europeo de Inversiones (BEI), Gobierno de España y Municipio de Portoviejo.
Santiago Perero, director de planificación y control del proyecto, dijo que se intervendrá en las parroquias Abdón Calderón, Alajuela, Riochico, Pueblo Nuevo, Chirijos, San Plácido, Crucita y Colón que es urbana pero tiene también sectores rurales como Pachinche.
En el proyecto también se incluye la intervención en la planta de tratamiento Cuatro Esquinas y existe un proyecto complementario en comunidades dispersas, acotó Perero.
Para esto último habrá dos fases, estando en la primera 7 sistemas de agua y saneamiento en 17 comunidades, en la que se invertirá 3,2 millones con financiamiento del Fondo de Cooperación para Agua y Saneamiento (FCAS-AECID). En la segunda fase se invertirán 11,89 millones con financiamiento del Instituto para Inversiones en América Latina (siglas en inglés LAIF-AECID).
Perero indicó que ya se dio un desembolso de 360.000 dólares para comenzar el proyecto, siendo una de ellas la conformación de la Unidad de Gerenciamiento del Programa (UGP).
La estrategia comprende ejecutar 7 contratos, una de ellas la planta captación y tratamiento de agua potable en el sector de Mancha Grande (San Plácido) que producirá 500 litros por segundo.
Otra es para la línea de conducción y tanques elevados en cada parroquia para entregar el servicio por gravedad.
Habrá un contrato para Crucita y Colón y otro para el resto de parroquias, explicó.
Incluye también plantas de tratamiento de aguas residuales donde se necesita, y otro para el fortalecimiento de la empresa municipal Portoaguas.
Según información publicada en la revista institucional del municipio, 5.500 hogares tendrán alcantarillado sanitario, 23.600 agua potable y 82.000 habitantes de las parroquias rurales serán beneficiados directamente.
La misma producción periodística, señala que se emplearán tuberías de hierro dúctil para evitar la oxidación y preservar la calidad del agua.
La línea de conducción que saldrá desde la planta ubicada en Mancha Grande será de 47,94 kilómetros.
En la foto, un ciudadano es informado del proyecto durante el Encuentro de Ciudades Sostenibles que se realizó en los predios de la Universidad Técnica de Manabí.