Barcelona se despidió de la Copa Libertadores 2021 entre el aplauso de sus hinchas

FOTOS: FRANKLIN JÁCOME POOL

Toda felicidad o decepción siempre lleva un nombre. La tristeza, el llanto, el coraje y la impotencia del pueblo barcelonista tiene nombres y apellidos, y son dos:El arquero Diego Alves, el añejo golero de Flamengo, y el delantero Bruno Henrique, que en los dos partidos le hizo 4 goles.

Sí, ellos son los ‘culpables’ de la eliminación. El golero le ha tapado al Ídolo cinco goles cantados en los dos partidos.

La notable actuación de Alves y Henrique,  el 29 de septiembre del 2021 en el estadio Monumental Banco Pichincha, hizo la diferencia. Si se dijo que en Brasil el 2-0 ‘no era real’, debido a que Alves tapó tres goles, anoche el golero volvió a hacer lo mismo, no dejó pasar nada.

Cuando los hinchas canarios ya estaban cantando los goles de Gonzalo Mastriani, Byron Castillo y Emmanuel Martínez, el golero sacaba las manos y se quedaba con la pelota.

Barcelona SC - Flameng (7098270)
El arquero Javier Burrai de Barcelona disputa un balón con Gabriel Barbosa ‘Gabi’ de Flamengo. FRANKLIN JÁCOME POOL

Ojo, y decimos cuáles son los ‘culpables’ de la eliminación canaria, para que ningún hincha tilde de ‘salado’ a cualquiera de los aficionados que anoche volvieron al Monumental.

El 2-0 con que ganó Flamengo dejó a Barcelona con las ganas de jugar su tercera final.

SOLO UNA ILUSIÓN

Soñar con la remontada solo duró 17 minutos, porque el primer gol lo hizo Bruno Henrique. Claro que antes de eso los “casi goles” amarillos ya se habían cantado.

DE ENTRADA

La diferencia de las plantillas de Flamengo y Barcelona se nota en el resultado. Un equipo brasileño que cuesta cerca de los 200 millones ante los 16 que está valorada la amarilla.

Y el despertar del sueño de la remontaba se dio a la entrada del segundo tiempo, apenas se jugaba los cuatro minutos y otra vez el enemigo número uno del Barcelona, Bruno Henrique, puso el 2-0, para un global de 4-0.

Barcelona hizo todo lo que pudo con su juego, pero no le alcanzó. Al frente tenía un rival superior.

En realidad, el Ídolo, que al inicio del torneo nadie daba nada por su participación, podemos decir que con garra y fe llegó lo más lejos: estar entre los 4 mejores de la Libertadores del 2021.

Ahora tiene la misión más difícil, buscar un lugar en LigaPro que le dé la clasificación a la Copa, que en el 2022 tendrá como sede de la final a su estadio.

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