El Presidente del Consejo de la Judicatura (CJ), Gustavo Jalkh, alertó a la ciudadanía sobre la existencia de intereses que pretenden desestabilizar a la Corte Nacional de Justicia (CNJ).
Este 31 de mayo, durante la presentación de pruebas de descargo dentro del proceso de evaluación que realiza el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social Transitorio (CPCCS-T), el doctor Jalkh manifestó, entre otras cosas, que es preocupante que el informe preliminar del organismo evaluador cuestione el proceso de renovación parcial de la CNJ, sobre todo cuando ese concurso se desarrolló de acuerdo a la Constitución y a las normas de paridad de género, medidas de acción afirmativa e impugnación ciudadana.
En una audiencia pública que duró 30 minutos (tiempo fijado por el CPCCS-T) el titular del CJ aseguró: “Me parece, y esto es importante que el país lo sepa, que hay algún interés que quiere generar un ambiente para desestabilizar la Corte Nacional de Justicia”, dijo.
Recordó que en el año 2004, con argumentos similares, el Congreso Nacional destituyó a la Corte Suprema de Justicia e impuso la denominada “pichicorte”.
“Tal vez hay algún asesor que, con criterios parecidos, quiere generar esto. Lo denuncio ante el país. Esto no es inocente. Queda claro que este informe en ese aspecto no tiene ningún sustento y al contrario podría existir algún oscuro interés de tomarse la Corte Nacional de Justicia”, señaló.
Sobre el informe de la Contraloría DAAC-0070-2016, que contiene observaciones al proceso de selección de fiscales, Gustavo Jalkh aseguró que este documento establece responsabilidades para la Fiscalía y no para las autoridades de la Judicatura
En ese contexto, exhibió una certificación de la Contraloría que confirma que ni él ni los vocales del CJ, tienen responsabilidades administrativas o civiles por los concursos de fiscales realizados entre 2010 y 2015.
“Es muy claro entonces que no se puede concluir, en función de estos informes, que los concursos hayan sido amañados, decir esto es un irrespeto a los jueces del Ecuador y a los fiscales que no merecen ese tipo de comentarios”, indicó.
Al referirse a los cuestionamientos por la supuesta mala aplicación del error inexcusable, el Presidente Jalkh ratificó que la Judicatura está plenamente facultada por la Constitución para ejercer la acción disciplinaria en la Función Judicial.
Señaló que los tribunales de lo Contencioso Administrativo, la Corte Nacional de Justicia e incluso la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a través de sus sentencias, reconocen la potestad disciplinaria del Consejo de la Judicatura en la aplicación del error inexcusable.
Los vocales Karina Peralta, Rosa Elena Jiménez, Néstor Arbito y Alejandro Subía decidieron no ejercer su derecho a la defensa en la audiencia. Esto tras un incidente en el cual el presidente del CPCCS –T, Julio César Trujillo, ordenó al doctor Jalkh que se siente en un lugar determinado. Incluso lo amenazó con llamar a la Fuerza Pública “para que lo reduzca al sitio que le corresponde”.
Ante ello y para evitar confrontaciones, el titular del CJ salió de la sala de sesiones y más tarde, en rueda de prensa calificó a la actuación de Trujillo como “un atropello”.
El Presidente de la Judicatura señaló además que él y los vocales del CJ esperarán a ser notificados con la decisión final del organismo evaluador para, si es del caso, interponer un recurso de revisión.