Un total de 12 personas fueron sancionadas en Ecuador, y cinco de ellas despedidas de sus puestos de trabajo a causa del cambio de dos recién nacidas en el Hospital General San Francisco de Quito, del Instituto Ecuatoriano del Seguro Social, en la sector de Carcelén, en el norte de Quito.
El caso saltó a la palestra pública el pasado día 1 de marzo, cuando familiares y amigos de Andrea, una de las madres, organizaron un plantón en los exteriores de la casa de salud denunciando negligencia.
Las madres denunciaron que las bebés fueron cambiadas, incluso trascendió que el padre de una abandonó su hogar en medio de la confusión.
Un comunicado del IESS señala que, según las primeras investigaciones internas realizadas en el Hospital General San Francisco, se determinaron responsabilidades por incumplimiento de prácticas administrativas contenidas en el Manual de Seguridad del Paciente.
“Inicialmente se han establecido sanciones administrativas para 12 funcionarios pertenecientes al área de salud. Un primer grupo de cinco personas involucradas dentro del caso, serán notificadas hoy con la separación de sus cargos. Existen otros casos en los que se han iniciado los procesos correspondientes, conforme la normativa legal vigente”.
En el comunicado se Informó que la semana pasada enviaron una solicitud a la Agencia de Aseguramiento de la Calidad de los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (ACESS), institución adscrita al Ministerio de Salud Pública, para que realice un examen de auditoría externa que garantice absoluta transparencia en el proceso de investigación.
Otro elemento a informar, tiene relación con la favorable evolución del estado de salud de las recién nacidas, a quienes se les realizaron todos los exámenes médicos necesarios por parte de personal de salud del Hospital Carlos Andrade Marín.
Estas acciones se enmarcan en el cumplimiento de los compromisos asumidos tras el diálogo desarrollado el pasado jueves 1 de marzo con Andrea Quirola y Camila Pérez, madres de las menores, y continuarán durante el proceso investigativo que llevan adelante tanto la ACESS, como la Fiscalía General del Estado.
“El Hospital General San Francisco seguirá brindando las prestaciones médicas a las recién nacidas, precautelando la salud y garantizando el bienestar y óptimo desarrollo de Amelia y Carla Victoria, dos niñas que han marcado una diferencia sobre la importancia en la calidez y calidad en la prestación de los servicios de salud”, señala el IESS. (Agencia Andes)
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