La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) pidió el martes, 9 de mayo de 2023, que se impongan «castigos ejemplares» a los futbolistas que sean hallados culpables de hacer amaños en partidos para favorecer a una mafia de apuestas deportivas.
El presidente de la CBF, Ednaldo Rodrigues, defendió la suspensión preventiva de los investigados y que se prohíba su continuidad en el deporte de aquellos jugadores cuya participación en los fraudes quede «comprobada».
En el comunicado, la CBF afirmó que trató con la FIFA del caso, que se refiere a los supuestos amaños que se han descubierto en 13 partidos de fútbol disputados desde el año pasado, incluidos ocho de la liga de primera división.
No obstante, la federación rechazó la posibilidad de suspender el Campeonato Brasileño por el escándalo.
La fiscalía del estado de Goiás presentó cargos contra 16 personas, entre ellos 7 futbolistas, que son sospechosos de cobrar sobornos de hasta USD 20 000 a cambio de forzar tarjetas amarillas o rojas, cometer penaltis o perjudicar a sus equipos para favorecer a la mafia de las apuestas deportivas.
Según documentos filtrados por la prensa, 50 jugadores fueron citados en las investigaciones.
Jugador ecuatoriano involucrado
Cuatro equipos de primera división anunciaron este miércoles, 10 de mayo, la suspensión preventiva de cinco jugadores que han sido citados en el caso, pero que no están en la lista de investigados.
Athletico Paranaense, finalista de la Copa Libertadores 2022, suspendió al ecuatoriano Bryan García y a Pedrinho; Fluminense, a Vítor Mendes; Cruzeiro a Richard; y América, a Nino Paraíba.
Los siete futbolistas formalmente investigados son: Eduardo Bauermann (Santos), Igor Cariús (Sport), Víctor Ramos (Chapecoense), Paulo Miranda (Náutico), Fernando Neto (Sao Bernardo), Matheus Gomes (Sergipe) y Gabriel Tota (Ypiranga).
El ministro de Justicia, Flávio Dino, anunció igualmente que ordenó a la Policía Federal ampliar la investigación del caso, que de momento era conducida por las autoridades regionales de Goiás.