Decenas de personas rodeaban a quienes bailaban al son de la banda de pueblo, en la plaza Eloy Alfaro de Montecristi. Eran las fiestas de san Pedro y san Pablo en este cantón, y los asistentes, algunos sin mascarillas, gozaban de los pasos de los integrantes de los diversos palacios de gobierno de esta celebración centenaria en esta localidad.
A pesar de que la pandemia del COVID-19 aún no se ha terminado persiste entre las personas la incivilidad, el desacato a las normas de bioseguridad. Las personas asisten a lugares de concurrencia masiva, algunos sin la protección debida, según fotos y videos captados las noches del sábado y domingo pasados.
Nelson Palacios, uno de los coordinadores de esta fiesta en Montecristi, indicó que solo se ha pedido permiso al párroco de esta ciudad para la realización de la misa de cada uno de los presidentes (nueve), pero no para realizar bailes, pues aquello de tener una banda de pueblo al salir de la misa y bailar unas cuantas canciones es algo personal de cada presidente de gabinete.
Para este año solo se dio paso a misas.
No es el único lugar donde se observaron reuniones masivas de personas en Manabí. La noche del pasado sábado en una zona rural de la parroquia Canoa, en el cantón San Vicente, la Intendencia de Policía desalojó a cerca de cien personas que realizaban una fiesta que no tenía autorización.
Otra fiesta clandestina se desarrolló en una ciudadela limítrofe entre Manta y Montecristi. Ahí las autoridades policiales desalojaron a decenas de menores de edad que asistieron a una reunión en donde también se hallaron botellas de licor, al igual que una caneca de alcohol.
Samuel Rodríguez, agente de la policía nacional, indicó que el operativo fue interinstitucional, y al cual se llegó tras una denuncia ciudadana.
Una vez que llegaron al lugar fueron llamados los padres de los menores para que los fueran a recibir. Algunos de los jóvenes fueron regañados por sus parientes.
Yandri Vera, intendente de policía de Manabí, confirmó de la fiesta en la urbanización Sí Vivienda, del sector de Montecristi, de la cual se evacuó a los menores tras el llamado a los familiares.
“Son los COE cantonales los que tienen que revisar los eventos luego autorizar, nosotros lo que hacemos es controlar, verificar y sancionar si son establecimientos administrados por el Ministerio de Gobierno”, declaró Vera.
Otra fiesta que también se viralizó en redes sociales fue una identificada en la parroquia Picoazá, de Portoviejo. Hasta el 27 de junio de este año, Manabí había registrado 31.861 casos, 1.048 más que el 1 de junio de este año; mientras que decesos relacionados con la pandemia en esta provincia -entre confirmados y probables-, se registran 3.701, 90 más que los reportados el 1 de este mes. (El Universo)
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