La exasambleísta del movimiento Alianza PAIS y exvicepresidenta de la República, María Alejandra Vicuña, llegó al primer día de audiencia de juicio por el proceso que enfrenta, relacionado con un presunto delito de concusión.
Ayer, en el octavo piso de la Corte Nacional de Justicia (CNJ), la recibieron unos 30 simpatizantes. La Policía intervino para que la gente guarde silencio y respete el espacio jurídico previo a la instalación de la diligencia.
Vicuña se sentó al costado izquierdo del estrado, lugar que siempre ocupa la parte acusada. Frente a ella se sentaron el fiscal general subrogante, Wilson Toainga; el representante de la Procuraduría General del Estado, Marco Proaño y otros funcionarios.
El Tribunal Penal, integrado por los jueces Marco Rodríguez (ponente), Willman Terán y la jueza Daniella Camacho, escuchó lo expuesto por Toainga, quien además presentó 21 personas, entre testigos y peritos.
Cobro de ‘diezmos’
De acuerdo con los alegatos de la Fiscalía, entre los períodos 2009-2013 y 2013-2017, cuando Vicuña se desempeñó como asambleísta por Guayas, recibió por pago de los denominados ‘diezmos’ la suma de 43.295 dólares en dos cuentas bancarias personales.
Según Toainga, la procesada “transgredió la Ley” exigiendo a sus colaboradores dichos pagos, a cambio de mantener sus puestos de trabajo en la Asamblea Nacional. Agregó que estos dineros tuvieron como destino el financiamiento del movimiento Alianza Bolivariana Alfarista (ABA), que no está registrado en el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El Fiscal mencionó tres nombres de funcionarios. Uno de ellos fue el de Ángel Sagbay, quien se desempeñó como asistente administrativo y luego fue ascendido a asesor 1 de la asambleísta. Precisó que él hizo 48 transferencias a las cuentas personales de Vicuña, sumando un total de 23.300 dólares.
Se ratificó
El excolaborador de la procesada fue uno de los testigos citados por la Fiscalía. En su declaración, Sagbay se ratificó ante el Tribunal en la declaración juramentada que metió a Vicuña en este lío judicial.
Ana María Ontaneda, abogada de la exasambleísta, reconoció la existencia de esos aportes, sin embargo, aclaró que fueron entregados voluntariamente porque Sagbay fue militante del movimiento ABA y, por medio de dicha agrupación política, buscó posicionamiento en cargos públicos.
La defensa agregó que, al no cristalizar estas aspiraciones, desvirtuó el concepto de las aportaciones para obligar a Vicuña a entregarle funciones en la Vicepresidencia cuando ella encabezó la entidad.
La exvicepresidenta también cuestionó a Sagbay y agregó que su declaración fue “falseada”. Dijo que los dineros fueron entregados por militantes y destinados para financiar las actividades del movimiento ABA. “Que la justicia se imponga ante la infamia de unos cuántos canallas”, dijo Vicuña.
En una breve declaración con la prensa, Sagbay negó que haya estado chantajeando a su exjefa para obtener altos cargos públicos.
La audiencia continuará hoy, a las 09:00, con la fase de prueba que exponga la Fiscalía y la defensa de la procesada. (La Hora)