Una nueva vida se salvó en Unidad de Quemados del Hospital Manta, única de la zona
Para Rosa del Carmen M., de 56 años, la Unidad de Quemados del Hospital General Manta del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS), es un lugar que recordará siempre; «aquí me salvaron la vida». Así se refirió Rosa del Carmen, al abandonar el hospital, luego de recibir el alta médica al estar recuperada de quemaduras en gran parte del cuerpo.
El 16 de junio pasado, justo cuando se celebraba el Día del Padre y se aprestaba a encender un horno casero, se inflamó el combustible al contacto con el fuego, lo que le provocó las quemaduras.
La paciente, oriunda de San Vicente, en primera instancia fue trasladada al Centro de Salud Bahía de Caráquez del IESS, donde le brindaron las primeras atenciones; por la gravedad de las heridas fue derivada al hospital de Manta.
En esa casa de salud, el personal médico, liderado por el cirujano Gustavo Gonima, asumió el reto de tratar a la paciente, quien presentaba quemaduras de segundo y tercer grado, con afectación en el rostro, cuello, tórax, extremidades superiores y espalda; es decir, el 18% de su cuerpo resultó afectado.
«La recuperación de la paciente ha sido exitosa, pese a que su diagnóstico fue complicado y desalentador; no solo por las graves quemaduras, sino porque es paciente con hipertensión, obesidad y diabetes no controlada. Pese a ello, asumimos el reto; y no es el primer caso con estas complicaciones que hemos tratado y con resultados satisfactorios», señaló el médico.
El hospital Manta del IESS, es la única casa de salud, de la región, con una Unidad de Quemados moderna y equipada con tecnología de punta, considerada para brindar atención de alta complejidad (tercer nivel de atención).
«Mi caso fue muy grave, no sé qué hubiera pasado conmigo si no existiera la Unidad de Quemados; agradezco a Dios y a todo el personal médico, quienes con profesionalismo me trataron. Y hoy, después de 37 días, regreso a mi casa totalmente recuperada», aseguró Rosa del Carmen.
La paciente fue sometida a una serie de tratamientos y procedimientos de alta complejidad que lograron aliviar y sanar las heridas que presentaba.
Esta Unidad de Quemados, cuenta con 4 camas, al servicio de los asegurados. Entre abril y diciembre del primer año de funcionamiento (2018) atendió a 57 pacientes; y en el primer semestre de 2019, se ha atendido a 50 personas.
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