Sector pesquero artesanal de Manta y Portoviejo con capacidades adaptativas medias tras terremoto y pandemia

Un informe realizado por el Observatorio Ciudadano de Políticas Públicas de Manabí, reveló que el sector pesquero artesanal de Manta y Portoviejo es medianamente resiliente, con un índice promedio de 46,35% sobre 100. Esto quiere decir que, si bien existen ciertas capacidades y compromisos, el progreso no es completo ni substancial.

El Observatorio Ciudadano, midió la capacidad del sector pesquero para responder ante los impactos de un evento disruptivo en tres dimensiones, a través del Índice de Capacidades Económicas Adaptativas (ICEA).

El ICEA mide la resiliencia en: acceso a crédito y financiamiento, fortalecimiento de cadenas productivas y fortalecimiento de cooperación entre instituciones y organizaciones; tomando como caso de estudio al sector pesquero artesanal en Manta y Portoviejo.

El levantamiento de información se realizó con una muestra de 200 pescadores ubicados en San Mateo y Crucita, para cuantificar la capacidad de resiliencia del sector, luego de la ejecución del proyecto emblemático del Ministerio de Agricultura, Ganadería, Acuacultura y Pesca “Muelles y Facilidades Pesqueras¨.

En cuanto a la dimensión de acceso a crédito y financiamiento, el resultado promedio fue de 41,5%, que equivale a resiliencia media.

En lo referente a cadenas productivas, los pescadores son medianamente resilientes con un 53,5%.

Con respecto a la cooperación y el rol de las instituciones en las actividades pesqueras el nivel es del 47,6%, es decir, se observa un nivel medianamente resiliente.

Con base en los valores obtenidos en las tres dimensiones anteriormente descritas, el estudio devela que el sector pesquero artesanal de Manabí y Portoviejo es medianamente resiliente, ya que existen ciertas capacidades y compromiso, pero el progreso no es completo ni substancial.

Estos resultados evidencian que la construcción de facilidades pesqueras, ha sido un aporte al desarrollo productivo, pero no se logra generar capacidades resilientes.

Otra conclusión importante del estudio es que el fortalecimiento de las capacidades resilientes en el ámbito económico productivo debe ser integral, pues las cifras expuestas demuestran que la sola construcción de facilidades pesqueras no aporta en variables de mayor peso como el acceso a crédito.

Con estos resultados, se constata la necesidad de que el Estado asigne recursos para acciones de prevención y recuperación ante desastres, a la percepción de precio justo sobre los productos derivados de la actividad pesquera, y al respaldo asociativo.

El estudio da seguimiento a tres ejes de la Agenda de Reactivación Productiva y Económica de Manabí, priorizados por el Observatorio Ciudadano: valor agregado local; infraestructura productiva y promoción de inversiones; y turismo y revela un retraso generalizado en la implementación de la Agenda.

Según este informe, el Valor Agregado Bruto (VAB) de Manabí decreció de forma sostenida, alcanzando un 6,5% en 2016 y un 5,8%% del total nacional en 2019.

El VAB es uno de los indicadores más importantes para evaluar la actividad económica de un sector o de toda la economía. El informe indica que el VAB podría disminuir ante el decrecimiento de los principales sectores económicos: construcción, 14,2 %; agricultura, ganadería, silvicultura y pesca, 3,3 % y comercio, 4,8 %.

Además, identifica una tendencia creciente en los últimos años en el turismo, el sector más golpeado por la pandemia, que entre 2015 y 2019 representó en promedio el 1,8% del VAB total de la provincia.

Asimismo, Manabí alcanza un nivel medio de competitividad provincial en Ecuador, con una puntuación de 42,4/100, detrás de Pichincha, Galápagos y Guayas, provincias que lideran la puntuación.

El Observatorio Ciudadano de Manabí es un espacio conformado por representantes de la academia y de la sociedad civil que realiza investigaciones sobre las políticas públicas de reactivación de la economía. Es implementado por la iniciativa Hacia Comunidades Resilientes, conformada por FARO, Fundación Esquel, La Universidad San Gregorio de Portoviejo, con fondos de la Unión Europea.

En el marco de esta iniciativa, FARO ha trabajado con estudiantes y docentes de la Universidad San Gregorio de Portoviejo y líderes de organizaciones de la sociedad civil de la provincia para crear un espacio que contribuya con información y evidencia para la toma de decisiones y el mejoramiento de políticas públicas, a través de investigaciones relacionadas con la reactivación económica de Manabí post-terremoto, e información georreferenciada sobre los proyectos de reconstrucción y desarrollo territorial.

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