La asambleísta Johanna Moreira puso en debate en la Asamblea Nacional y, que se replicó en todo el país a través de las redes sociales, el tema de la salud y la higiene menstrual. Ella propuso un proyecto de ley para procurar que las personas de escasos recursos accedieran a los artículos de aseo personal.
En el documento que se expuso el pasado 15 de junio, se indicó la intención es «garantizar el acceso efectivo, gratuito e irrestricto a productos y materiales de salud e higiene menstrual asequibles, sustentables y de alta calidad que satisfagan las necesidades y opciones de las personas menstruantes en centros educativos, centros y subcentros de salud y centros de privación de libertad».
Desde entonces, el tema de costos de los productos específicos para esta necesidad saltó a las redes. El pedido de Moreira llegó incluso a la Defensoría del Pueblo para tratar este tema.
El proyecto poco a poco suma voces a favor, como el Centro de Derechos Económicos y Sociales (CDES). «Este fenómeno encuentra su lugar más preocupante en los productos dirigidos a la salud sexual y gestión de la menstruación. En el Ecuador estos productos son catalogados como ‘especiales o de lujo’ y por tanto se gravan con el 12% del Impuesto al Valor Agregado (IVA) a pesar de que menstruar no es ni lujo ni especial: es natural, y por tanto ineludible para todas las mujeres y cuerpos menstruantes por lo menos 40 años de sus vidas», precisó esta organización.
Según un estudio realizado por la organización Plan internacional por la Niñez, se calcula que la mujeres gastan $ 42 anualmente solo en toallas sanitarias. Y según el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), en sus estadística del 2020, el 32% de la población vive con $ 2 diarios. Por ello nace la propuesta de la asambleísta de generar la condiciones para que las niñas, adolescentes y mujeres de escasos recursos tengan garantía de acceder a estos insumos sin el pago del IVA. (Telégrafo)