Después de que el equipo levantara la Copa Sudamericana en el 2019, la dirigencia del Independiente del Valle se reunió para planificar una nueva era en el club. Fortalecer las canteras siempre estuvo como prioridad, pero también se plantearon conseguir resultados deportivos.
El éxito alcanzado a escala internacional hizo que la base del equipo campeón se fuera desarmando. Los directivos se vieron obligados a reestructurar sus bases, desde la dirección técnica. Del equipo que se coronó en Paraguay, apenas quedaron seis jugadores.
El primer paso era traer un cuerpo técnico que tenga una visión de juego parecida a la que ya se había institucionalizado. Renato Paiva cumplía con el perfil de formador y de estratega. Calzó rápido en la filosofía del club. Al punto que se generó una sinergia con formativas parecidas a la que se había logrado con el español Miguel Ángel Ramírez.
Llegaron futbolistas claves como Lorenzo Faravelli y Jonatan Bauman, pero también se promovieron algunos talentos. Johaner Chávez, Darlin Leiton, Bryan García, Joan López, Kléber Pinargote y José Hurtado fueron algunos que dieron el salto al primer equipo.
Con el cuarto presupuesto más alto de la Serie A (USD 6,3 millones) logró dejar en el camino a los favoritos que tenían billeteras más gruesas y que hicieron mayores inversiones como Emelec, Liga de Quito y Barcelona.
Su mérito fue mantener sus políticas de contrataciones, apuntando a talentos que podían potenciar al equipo dentro de la dinámica de juego. Jonatan Bauman, Fernando Gaibor y Júnior Sornoza se unieron al proyecto y con ellos se fue consolidando la propuesta de Paiva y de la dirigencia.
“Yo creo mucho en el crecimiento individual de los jugadores, si logramos primero eso, luego los juntamos a todos y tenemos un buen funcionamiento colectivo”, aseguró Paiva.
Actualmente, es el virtual ganador de la Segunda etapa y finalista del campeonato nacional. Su camino hasta esta instancia estuvo marcado por la gestión de su directiva, la fortaleza de sus canteras y el estilo de juego implantado desde el 2017-2018.
En los meses más críticos de la pandemia del covid-19, el equipo no se detuvo. Con inversión de la empresa privada se edificó su estadio, junto al complejo de Chillo Jijón. Ahí el equipo se hizo fuerte, logrando cosechar puntos claves que le permitieron mantenerse como líder desde la primera fecha de la Segunda etapa.
“Yotengo mi cuerpo técnico y trabajamos fuerte. Llegamos a un club para ser campeones. Vamos a pelear para conseguirlo”, aseguró el entrenador portugués.
Los rayados jugarán su cuarta final en los últimos seis años. La primera experiencia fue en la Copa Libertadores del 2016. Desde entonces el club ha vivido toda una metamorfosis que les permitió conquistar objetivos institucionales y deportivos.
Por ahora su hazaña más importante fue la obtención de la Sudamericana. A nivel local jugará la primera.
“No comparto con quien dice que Independiente se cae en las finales. Hemos jugado dos continentales. Esperemos tener una nueva oportunidad de final en este 2021”, dijo Santiago Morales, gerente de IDV.
Cantera que se fortalece
?En septiembre, el DT Renato Paiva tuvo un verdadero desafío. El golero Moisés Ramírez fue expulsado y tuvo que recurrir a sus canteras para encontrarle un reemplazo. Las opciones eran el manabita Joan López, de 19 años, y el esmeraldeño Kléber Pinargote, de 18 años. Ambos sin experiencia. Este año subieron al primer plantel 11 jugadores. Todos tuvieron minutos y se proyectaron a nivel internacional. El caso más emblemático fue el de José Hurtado. El defensor incluso fue convocado a la Selección para la Copa América y eliminatorias. Además repatrió a Steven Plaza y a Júnior Sornoza, goleador histórico del club.
Exportador de talentos
Independiente del Valle mantuvo la línea de exportar jugadores. Entre octubre y mediados de noviembre envió a cinco jugadores al Numancia de España, club que fue adquirido por el mismo grupo inversor de los rayados. El club busca que sus jugadores de proyección tenga la experiencia del fútbol europeo. Se fueron para hacer pasantías al cuadro ibérico.
Vendieron siete jugadores entre el 2019 y 2021. Ellos fueron Piero Hincapié, Moisés Caicedo, Leonardo Realpe, Ángelo Preciado, Alan Franco, Washington Corozo y Pedro Vite. También transfirió a varios a clubes locales como Alejandro Cabeza y Bryan Riveros.