En Quito, la recién nacida que fue encontrada hace unos días abandonada entre los matorrales de una zona rural, goza de buena salud, por lo que fue trasladada hasta una casa de acogida para menores.
Médicos del hospital Baca Ortíz entregaron a Esperanza, la recién nacida que fue rescatada días atrás, dentro de un saco de yute, en el sector de Píntag.
La bebé permaneció durante 7 días bajo el cuidado de los doctores y enfermeras de este hospital.
La pequeña, sana y salva, fue llevada por los miembros de la Dinapen hasta una casa de acogida para menores en el Valle de los Chillos, donde fue recibida con amor.
Esperanza ahora tiene una nueva oportunidad de vida, mientras la Policía continúa con las investigaciones a fin de ubicar a los padres de la pequeña.
Datos estadísticos revelan que en el 2018 se encontraron 12 bebés abandonados; en el 2019, 5 niños; y en lo que va de este año, ya se han rescatado 4 pequeños.
Para los uniformados, estas cifras son preocupantes por el riesgo que corren los niños cuando son abandonados.
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