La expresidenta surcoreana Park Geun-hye renunció hoy a apelar la sentencia a 24 años de prisión que le impuso la justicia de su país por su papel en la trama de corrupción de la «Rasputina», que forzó su destitución en enero de 2017, informó la agencia local Yonhap.
Park presentó su renuncia de recurso ante el Tribunal de Distrito Central de Seúl, el mismo que la condenó a cárcel el 6 de abril, aunque sí se celebrará un juicio de apelación, dado que la fiscalía presentó un recurso tras quedar insatisfecho con el veredicto.
La expresidenta de Corea del Sur fue condenada a casi un cuarto de siglo en prisión y una multa de 18.000 millones de wones (13,5 millones de euros) tras ser hallada culpable de 16 de los 18 cargos que se le imputaban en el marco de la trama de la «Rasputina», entre ellos el de abuso de poder, soborno o coacción.
La fiscalía apeló la sentencia el mismo día del fallo, argumentando que el veredicto absolvió a Park de algunos cargos.
Park dejó de presentarse ante la corte el pasado octubre alegando problemas de salud y tampoco acudió a principios de mes a la lectura de la sentencia (que por primera vez en este país fue televisada), y ha denunciado que no ha sido juzgada de manera imparcial.
La sentencia de Park llegó con posterioridad a la de su amiga y cerebro de la trama de corrupción, Choi Soon-sil (apodada la «Rasputina» por su cercanía a la exmandataria), condenada en febrero a 20 años de cárcel y al pago de una multa multimillonaria.
Choi, amiga íntima de Park, era la principal responsable de la amplia red de tráfico de influencias urdida junto a la expresidenta, quien además le habría dado acceso a secretos de Estado. EFE