El Papa Francisco nombró el domingo a un administrador especial para la archidiócesis australiana de Adelaida, después de que su responsable fuera hallado culpable el mes pasado de ocultar abusos sexuales a menores por parte de un sacerdote.
Gregory O’Kelly -obispo de Port Pirie, una diócesis al norte de Adelaida- asumirá el cargo conocido en la ley de la Iglesia como “Administrador Apostólico”.
El Vaticano nombra a ese tipo de administrador en una variedad de circunstancias, incluyendo cuando un obispo o arzobispo no puede cumplir con sus funciones.
Philip Wilson, arzobispo de Adelaida y expresidente del máximo órgano de la Iglesia Católica en Australia, fue acusado de encubrir una ofensa grave de otro sacerdote, James Fletcher, después de ser informado en 1976.
Está previsto que Wilson sea sentenciado por un tribunal australiano en junio. Se enfrenta a una pena máxima de dos años de cárcel.
Los abogados de Wilson han argumentado que él no sabía que Fletcher había abusado de un niño. Fletcher fue hallado culpable en 2004 de nueve cargos de abuso sexual infantil y murió en la cárcel en 2006 por un derrame cerebral. (Reuters)
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